En esta ocasión nuestra revista concita entre otros, varios trabajos que fueron presentados en el XIII Internacional Forum of Psicoanálisis en Belo Horizonte- Brasil (Agosto 2004) dos de los cuales publicamos en portugués. Temas como la creatividad y perversión ocupan la mayor parte de este número, y lo completa una reseña de un libro de C. y S. Botella.

La creatividad y las mentes creativas siempre han supuesto un misterio y un desafío para el pensamiento psicoanalítico. La tentación de relacionar creatividad y locura sigue siendo fuente inagotable de posiciones a veces contradictorias entre los autores. Los estudios sobre normalidad/patología y lo diferente mantienen una apertura a la reflexión siempre inagotable.

Existe “anormalidad” en el creador? En el articulo “Creatividad y Perversión”, R. Aguillaume plantea la aparente anomalía, como un factor determinante y esencial de la Creatividad en desacuerdo con la cita “El creador lo es a pesar de su patología y no gracias a ella”de J. McDougall. Nos habla de la producción artística y la diferencia con la creatividad artística, del mecanismo de sublimación motor de la productividad y del mecanismo de renegación del perverso. De la creación ex nihilo que el mecanismo de la denegación otorga, aunque sea de forma engañosa. Y de esta forma nos intenta desvelar algún conocimiento más que disipe ese extraño misterio que es la creatividad.

A partir de la demanda “meter el tiempo” que formúla un paciente de un hospital psiquiátrico,

Ana Bedouelle, nos lleva de nuevo al concepto de creatividad y nos recuerda como la cuestión del tiempo atraviesa la pintura de distintas formas y en distintos maestros. Se plantea la necesidad del paciente esquizofrénico de introducir un tiempo narrativo, enmarcar un orden y acceder así a un tiempo simbólico.

Continuamos con dos trabajos sobre perversión. Ana Mª Rudge rastrea el concepto de perversión en sus significados extra-psicoanalíticos y en la metapsicologia freudiana. Propone abordar y dar al discurso perverso el estatuto que Lacan le negó, al considerar la autora que “todo ato de fala faz laço social”.

G. F. Baremblitt nos plantea si la posmodernidad, la globalización y neoliberalismo son sinónimos de una fase cínica del capitalismo que no ha generado más que un mundo de corrupción y amenaza. Si todo ello fuera cierto, nos convertiría en perversos posmodernos conscientes de nuestro gozo y del destino que nos espera.

Merece un recordatorio el libro “la Figurabilidad psíquica” de C. Botella y S. Botella, discutido en nuestros seminarios internos y que de la mano entusiasta de Pablo J. Maestre, autor de la reseña del mismo, nos adentra en las principales líneas para seguir a unos pensadores, los Botella, que recopilan ensayos y el trabajo a lo largo de veinte años.